Westbay, Zavier Gael

▲ Edad: 18 años.
▲ Grupo: Sexto curso.
▲ Rango: Estudiante de sexto curso.
▲ Played by: Oliver Stummvoll.
▲ Deporte: Soccer (Arquero).
▲ Actividad Extra: Carpintería.


▲ Fecha de Nacimiento: 17, septiembre, 1997.
▲ Lugar de Nacimiento: Los Ángeles, CA, USA.

Su padre, Abraham Westbay, es un político corrupto, que acepta sobres por doquier y no duda en ningún momento de extorsionar y chantajear a todo aquel que se interponga en su camino con tal de hacerse de oro. Lydia Roxton, por su parte, fue aquella joven estudiante de intercambio británica que se enamoró de un estadounidense y lo dejó todo, su familia, su carrera, incluso renunció a todo contacto con sus antiguos amigos para vivir con él una vida lejos de todo lo que siempre había conocido.

Nacido dos años más tarde de la primera conversación entre los antes nombrados, en el seno de una familia poderosa, con dinero, toda clase de lujos que cualquiera pudiera imaginar, y mucho más allá, Timur fue el primogénito, el más querido e idolatrado por por sus padres en cada paso de gesto que daba. Un año más tarde, llegó Gael, que si bien disfrutó de todos los cuidados y nunca le faltó nada, fue totalmente ajeno a lo que se sentía como tener una madre y un padre. Lydia, deprimida tras el parto por haberse convertido en madre de dos niños tan joven, y que por aquel entonces empezaba a entrever lo que su marido era capaz de hacer con tal de tener el poder, culpaba a su hijo menor de todas las infidelidades del hombre, de que no la prestara atención y de que pasara muchas noches fuera en lugar de con su familia, repudiándolo como si no se tratara de su sangre. Por su parte, Abraham, apenas tenía tiempo entre sus chanchullos y sus líos de faldas para pasar por casa. Ni siquiera las dos niñeras que se encargaban de cuidar de ambos hermanos pudieron hacer que aquella carencia de cariño y familiaridad se viera reflejada durante la infancia de Gael.

Gael ya contaba tres años cuando Samantha, la tercera hija, llegó de rebote, no era esperada, Abraham no quería más hijos, pero Lydia, en su intento frustrado de recuperar el amor y la atención de su marido, puso fin a los métodos anticonceptivos, logrando traer al mundo a la criatura. Por alguna extraña razón que nadie supo comprender, aquella pequeña era la única capaz de calmar a Gael, quien no dejaba que prácticamente nadie se acercara a su hermana, siempre protegiéndola. Durante la más tierna infancia, fue un absoluto tifón, destructor de juguetes, que se metía en mil y una peleas en el jardín de infancia y tampoco le daba una tregua a su hermano mayor, que siempre terminaba pudiendo con él, todo en su afán por llamar la atención, porque mientras Timur era perfecto y trataba de enseñarle a Gael como serlo, él se negaba a aceptar aquellas normas, a obligarse a cumplir con aquellos extraños a los que le hacían llamar padres cuando nunca le habían leído un cuento para dormir ni dado un beso en la frente.

Todo cambió cuando celebraban el décimotercer cumpleaños del primogénito, Abraham se había llevado a los dos menores a Nueva York con él un par de días antes, mientras que Lydia viajaba junto a Timur en un avión para encontrarse en la Gran Manzana con el resto de la familia, cuando unas interferencias en la cabina hicieron que el avión se estrellara de forma terriblemente desastrosa, llevándose la vida de ambos. Desde entonces, se acabaron los juegos y los intentos de llamar la atención para Gael, su padre empezó a presionarlo, y el menor intentaba a toda costa que nada de aquello afectara a la pequeña Samantha, sumiéndose cada vez más en sí mismo, y entonces sí, esforzándose en hacerlo todo bien, en ser el Timur que su padre quería ver en él. Nunca ha llorado la pérdida de su familia, quizá porque no sé sintió parte de ella, o quizá porque las lágrimas son un símbolo de debilidad, y desde entonces, no se ha permitido que asomaran siquiera en sus ojos, acumulando todo el dolor para sí mismo, pero si algo ha hecho, es cuidar de su padre y de su hermana, protegerlos ante todo lo que pudiera y conservalos como su mayor tesoro, a pesar de todo el daño y las carecias que le habían causado.

Durante tres años y tras un nuevo matrimonio que llevó una nueva ocupante a la gran casa de los Westbay, la presión fue tal que empezó a sentir la asfixia que aquello le producía, se ahogaba en sus propios pensamientos y todo cuanto podía hacer era escapar, escapar entre sus libros y entre sus dibujos, perderse aferrado a la cadena de su hermano, como si aquello le pudiera dar la fuerza necesaria para ser lo que querían que fuera. Pero nunca lo fue, ni lo será, porque cuando aquella carta llegó, un mundo nuevo se abrió ante él, la posibilidad de serlo todo y no ser nada al mismo tiempo, la opción de elegir, y eligió marchar.

▲ Familiares:
» Abraham Westbay: Padre.
» Lydia Westbay neè Roxton: Madre, fallecida.
» Timur Westbay: Hermano mayor, fallecido.
» Samantha Westbay: Hermana menor.
» Vivian Westbay neè Gallagher: Madrastra.


Un joven de cabeza fría e ideas muy claras, al que cuesta demasiado hacer entrar en razón, si quiere algo y se empeña en conseguirlo y no habrá formade hacerle cambiar de parecer, en ocasiones resulta arduo tratar con él, y muchos saben ya lo mala idea que es tratar de hacerlo. No acepta que le den órdenes, simplemente es incapaz de respetar figuras autoritarias. Es muy ambicioso en aquello que quiere, aunque no tiene grandes metas a largo plazo y rechaza por descontado los planes de su padre de convertirlo en un hombre de política, persigue todos sus objetivos sin darse un respiro, su terquedad lo impulsan cada vez más lejos, cada vez más fuerte.

Reservado, y no es que no hable o no le guste relacionarse, sino que pocas veces da su sincera opinión, y absolutamente nunca muestra sus sentimientos, pues se siente plenamente vulnerable al hacerlo. Un rostro hierático, como las esculturas del Antiguo Egipto, es todo cuanto aquellos que no le conocen, y no se han molestado en hacerlo, recibirán, nada de sonrisas cálidas ni fugaces guiños de ojo rebosantes de complicidad como podría hacer con aquel pequeñísimo puñado que considera sus amigos. Las únicas personas que pueden detectar cuando miente o trata de ocultar algo son su hermana y sus amigos más cercanos, a los que puede contar con los dedos de una mano, para el resto, pasará como arrogancia, desdén, o incluso pasotismo ante cualquier cosa que pretendan contarle.

Es líder por naturaleza, aquel tipo de persona que si se tiene que hacer algo en grupo, toma el mando. De más está decir que prefiere mil veces los trabajos en solitario. Con su voz grave y su mirada intimidante es él quien decide cómo se hará algo, y tiene todas las facilidades para lograrlo, incluido una labia que suele sacar a relucir fuertes argumentos. Le gustan las mujeres más que a un tonto un lápiz, y aunque ha salido con muchas chicas, apenas le han durado un par de semanas antes de aburrirse, o eso dice él, pues lo cierto es que le aterra enormemente que alguien pueda acercarse a él, conocerle, y decidir que no merece la pena, que está roto y un pedazo más de celo no será suficiente para repararlo.

Todo lo bueno en él se ve reforzado cuando está junto a su hermana, es capaz de cualquier cosa con tal de protegerla, no dudará un instante en aceptar cualquier loca aventura en la que alguien podría resultar herido, estando completamente seguro de que estando junto a ella nada malo puede pasar. Irónicamente, odia la soledad, no le gusta estar solo en una habitación, sin escuchar ningún atisbo de ruido, necesita el piar de los pájaros de fondo, el pasar de las páginas del libro del compañero de al lado, o la simple sinfonía de suspiros en cadena para sentirse a salvo. Por si no había quedado claro, aunque no lo muestre, es muy inseguro, se siente débil y pequeño y necesita reforzarse en el papel de cruel abusón, metiéndose con otros, para no caer como un ángel de alas rotas.

Una mente ágil que disfruta de los retos y de la competición sana, muy ingenioso e imaginativo. Con mil ideas que le rondan la cabeza en todo momento, sin dar un cese momentáneo, incapaz de rendirse al aburrimiento o el sedentarismo. Tiene una vena artística muy creativa que pocas veces deja que salga a la luz, piensa que rompería la imagen de inhumano que le gusta dar. Le encanta la pintura y el dibujo, aunque todas sus obras están a muy buen recaudo, lejos de miradas curiosas. Se metió a carpintería porque adora trabajar con las manos, pensando que aquello sería más rudo.

Muy orgulloso, quizá demasiado, es incapaz de reconocer que se ha equivocado, al menos no en voz alta, aunque la culpa y los remordimientos golpeen una y otra vez contra su pecho. Tiene muchas dificultades para disculparse, y probablemente este sea su mayor defecto, le resulta terriblemente complicado asumir sus errores frente a otros, porque su padre siempre dijo que no se puede mostrar debilidad.

▲ Virtudes:
» Leal hasta la médula.
» Inteligente.
» Despierto.
» Ambicioso.
» Bromista en confianza.
» Cariñoso en mucha confianza.
» Líder.

▲ Defectos:
» Orgulloso.
» Prepotente.
» Abusón.
» Inseguro.
» Sarcástico.
» Reservado.
» Intimidante.


▲ Pertenencias: (Solo tres objetos)
» Una cadena con una cruz, no por ser creyente, sino porque era de su hermano, que siempre lleva al cuello.
» Un estuche de acuarelas y un cuaderno en el que plasma sus dibujos.
» Un ejemplar de El arte de la guerra.

▲ Enfermedades, Miedos y Manías:
» Tiene miedo al compromiso, a entregarse y resultar herido.
» Es asmático, por eso juega de portero, aunque le guste el soccer no sería capaz de soportar las carreras de un jugador normal.
» Suele rascarse la ceja cuando está nervioso.

▲ Habilidades:
» Es un gran bailarín de estilos clásicos, su madre le hizo dar clases desde una temprana edad.
» Es muy rápido corriendo en velocidad, aunque después aparezcan los problemas respiratorios.
» Tiene una velocidad de lectura muy por encima de la media.

▲ ¿Sabías que...:
» ...Gael siempre lleva encima su inhalador?
» ...Gael es un amante de la literatura?
» ...Gael aspira a bañarse desnudo en el lago?

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