Dos lenguas hacen mejor trabajo que una

—Mmmmhhh... Aaah— podía oírse desde el otro lado de la puerta cerrada. Era la hora del recreo y Jade había aprovechado para darse una escapada por el comedor. —Mmm, delicioso...— De pronto, la tranquilidad del sitio se vio interrumpida por las puertas golpeando al ser abiertas. ¿Quién osaba molestarla de esa manera? ¿Por qué no se iba a otro lado a molestar a otra persona? De hecho, la hoja de la puerta le rozó la manga de la camisa de mangas largas que llevaba puesta, pues estaba sentada sobre la mesa comiendo a cucharadas desesperadas de un pote de helado de chocolate y frambuesas a la crema, ¡toda una delicia artesanal!

Giró la cabeza en dirección a la figura que ingresaba al recinto cerrando deliberadamente las piernas son si se trataba de algún miembro del personal del instituto. Pero en vez de eso, se halló con su persona favorita en todo Dunkelheit. Inmediatamente se paró en la mesa y se arrojó a la espalda de ella al grito de: —[color:9cc6=#~6633ff]¡¡Elliooooot!!— como si fuese un aviso a que se pusiera rígido y no se ablandara bajo el repentino peso de Jade.

—¿Cómo has estado? Hace mucho no vienes a mi habitación. Y sí, ¡dos noches son mucho!— se dejó resbalar por la pierna del chico hasta el suelo, cayendo con sutilidad y delicadeza cual bailarina depositada por su compañero tras una pirueta con levantamiento. Acto seguido miró el pote casi vacío de helado, lo tomó y le ofreció una cucharada a su amigo.

Publicado por Jade Richteri Mar Sep 06, 2016 5:02 pm

Si no había traducido mal tan peculiar mensaje, el día de mañana: 14 de mayo del año en curso, la tercera reunión de la organización tendría lugar en una de las aulas más recónditas del instituto. Obviamente la impaciencia le hacía compañía tras prever el fiasco que podría ser aquella junta, pero no podía quedarse en su habitación de nuevo, esta vez no tenía pretexto alguno para mandar por delante a su hermanastro, mucho menos ahora que ambos habían sellado un acuerdo que podría devolverles la vida que se les estaba consumiendo en ese maldito lugar. No obstante, de aquí a que llegara el momento, era mejor calmar los nervios con todo aquello que le fuera posible: un buen café, por ejemplo, de nuevo esa bendita bebida se hacía presente en su vida y parecía convertirse en su adicción.- ¡¿Pero qué…?! - exclamó de repente y por inercia cuando un cuerpo extraño se hizo presente sobre el suyo. Claro está, fue capaz de reaccionar positivamente al contacto de la joven traviesa que había saltado a su espalda, pero eso no quitaba el ligero susto del que había sido víctima a causa de su peculiar efusividad.- No exageres, sólo han sido…- hizo cálculos mentales tan rápido como pudo.- no sé, ¿pero acaso importa? - murmuró mientras la chica descendía y se posaba sobre la superficie otra vez.

Se acomodó la ropa y agregó acto seguido.- Hice una pregunta.- le gustaba provocarla, por mucho que sus juegos pudieran terminar en una especie de disturbio, tal como ocurrió la última vez que dio lugar a las faltas que Richteri había citado hace un momento.- Anda, dime… ¿acaso importa? Porque si no recuerdo mal, hace dos noches me dijiste que no soy más que un paranoico estúpido, que estarás bien y que no estás dispuesta a calmar mis pesares tal como te lo pedí.- la miró sugerente y significativamente, haciendo alusión a un asunto netamente íntimo. Por supuesto, eso último iba en broma, ¿o no?

Publicado por Elliot Rhodes Miér Sep 07, 2016 1:37 am

—¡Claro que importa! Soy como tu novia en este lugar. ¿O acaso encontraste a otra chica con la cual divertirte?— reprochó primeramente, poniendo los brazos en jarra en la cintura, sosteniendo el pote del postre en la mano derecha. Luego relajó su falsa expresión enojada y dio una probada al chocolate. Dejó la cuchara en su boca.

—Bueno... puede que haya cambiado de opinión— dijo seductoramente jugueteando con la cuchara en sus labios y moviéndose como en vaivén mientras lo mirada desde abajo. —¿Por qué no vienes hoy? Podemos hacer la tarea juntos. Ya sabes: dos mentes piensan mejor que una. Y soy muy mala en biología...— insistió, tratando de convencer al castaño para que fuera a visitarla aquella noche antes del toque de queda.

Aunque nunca había pasado nada más entre ellos, a la estadounidense le gustaba bromear como si fueran amantes. Dentro del instituto lo celaba y fuera, le había enviado cartas con posibles ideas para futuras citas, aunque al músico, hasta donde la castaña sabía, tenía ligeros problemas para relacionarse con la gente... al menos personalmente, porque por medio de las misivas no parecía ser así.

—Sigo creyendo que eres un paranoico— lo apuntó con el cubierto a la nariz. — Pero estuve pensando (no te vayas a asustar por eso, que de vez en cuando lo hago) queeee... si estás preocupado por mí, lo mejor sería que...—bajó la voz hasta convertirla en un susurro, como si se tratara de algo confidencial — estemos lo más cerca posible.

Aguardó unos instantes para comprobar la reacción de su amigo.

—¿Y? ¿Qué te parece? ¿Verdad que es una gran idea? ¡Dí que sí, dí que si!— comenzó a brincar alrededor de Elliot como una niña creyéndose conejo.

Publicado por Jade Richteri Miér Sep 07, 2016 1:09 pm

Sonrió divertido.- Pues...- dejó la intención al aire, pretendiendo así provocar el incordio de su joven amiga que en ocasiones podía ser bastante territorial, aunque no era precisamente por lo que ella había sugerido, en realidad nunca pasaba nada impropio cuando ambos compartían un espacio completamente a solas y sin interrupciones.- ¿Hablas en serio? - esta vez casi suelta la carcajada. Jade era todo un caso de locura, por tanto, la única persona capaz de dibujar una gran sonrisa en el rostro del americano pese a lo afligido que se encontraba por las circunstancias que le rodeaban en Dunkelheit.- Oh, comprendo...- replicó mientras miraba con deseo lo que tenía enfrente, relamiendo sus labios con sutileza mientras prestaba atención al discurso que bien podría durar una eternidad.

El semblante de Rhodes se ensombreció un poco ante lo siguiente, por lo que entornó los ojos y resopló.- Sigues pensando que va en broma, ¿verdad? - habló con delicadeza, reservándose la peor de sus molestias para alguien que en verdad mereciera ser tratado de mala manera: Richteri no, por ahora.- Pero no, Jade. No quiero que me suceda lo que a los otros.- no diría nombres, pero sabía de varias personas que habían perdido a sus mejores amigos o familiares dentro de ese maldito edificio y, para ser sinceros, Elliot no quería agregarse a la lista. No por nada tenía planes aparte con Xavier, su hermanastro, mismo al que le repetía una y mil veces que su mayor objetivo era salir del instituto con él para poder reunirse con sus padres y hermano menor.- Sé que parezco disco rayado, pero ni tú ni Xavi parecen entenderlo del todo.- o quizá sí: el americano era un estúpido sujeto temeroso y cerrado de mente.

Respiró hondo y negó con la cabeza.- En fin, de cualquier modo aceptó tu oferta. Sé que dormiré muy tranquilo luego de estudiar contigo toda la noche.- intentó retomar el tonito pícaro que habían utilizado con anterioridad, aunque eso no quitaba que hubiera un ápice de verdad expuesta en sus palabras.- Por lo menos los fines de semana, porque los días restantes he de dedicar tiempo a otras asignaturas.- provocó nuevamente.

Publicado por Elliot Rhodes Dom Sep 11, 2016 5:58 am

—¡Claro que hablo enserio! Ya te dije: aunque no lo crea, de vez en cuando pienso. Y en ocasiones hasta surgen buenas ide...—pero su monólogo fue interrumpido por el tono seco de Elliot, que parecía casi ofendido por el comentario de la americana, quien se cruzó de brazos y lo miró de manera seria. —Oye, yo también me tomo esto muy enserio. Pero ya te dije: si estamos todo el tiempo juntos, no le pasará nada a ninguno de los dos. O por lo menos habrá menos posibilidades —le acercó una cucharada de helado de chocolate a los labios, esperando que el castaño la aceptara y tratando de subirle el ánimo.

Sonrió cuando su amigo aceptó la oferta, pero eso de las condiciones no le gustaban. ¿Qué parte de juntos no entendía? ¿Y por qué había ignorado su comentario sobre otra chica en el instituto? Volvió a insistir con el tema poniendo borrando cualquier mueca o signo de alegría o broma: —Ya. Si tienes a otra chica en la mira solo dímelo. No quiero que crea que andas con dos a la vez, o algo parecido. — ¿De qué clase de «otras asignaturas» estaba hablando el chico sino? A veces Elliot podía ser todo un misterio, y a Jade le encantaban los misterios, por lo que acosaría a su amigo ese mismo sábado en su habitación con cientos de preguntas sobre su sospechosa actitud.

Publicado por Jade Richteri Jue Sep 15, 2016 7:01 pm

Entornó los ojos y resopló.- Quita eso, Jade...- murmuró poco convencido ante la peculiar manera en la que su amiga le acercó el helado a los labios. No obstante, terminó cediendo cuando su lengua actuó por sí sola: ¿cómo decir no a la oportunidad de degustar el postre con sabor a chocolate? ¡Maldita tentación tan dulce! Estaba delicioso, no había lugar a dudas.- Tranquila. A estas alturas ya todas dan por hecho que eres mi novia.- se encogió de hombros y se dispuso a seguir su camino, pero antes de ir por el añorado café, se regresó a quitarle la nieve a Richteri sólo para fastidiarla un rato.- Ustedes las mujeres se arman muchos melodramas en la cabeza. Flojera me ha dado dar explicaciones.- comentó entre dientes, pues se había llevado la cucharita a la boca mientras caminaba. Por otro lado, cabe aclarar que su última referencia iba dedicada a toda aquella jovencita que había malinterpretado sus intenciones alguna vez, fuera para bien o para mal.

Al terminarse el helado, depositó la basura en su sitio y solicitó por fin lo que había venido a pedir.- No. Sin azúcar, por favor.- aclaró a la cocinera sin imprimir en sus palabras mayor emoción, como de costumbre. Luego entonces, añadió: - Y otro helado de chocolate, si es tan amable.- su galantería no le permitía quedar como un patán frente a la chica que llevaba tanto tiempo soportando sus tonterías.- Gracias.- se despidió de la mujer y caminó hacia la mesa más cercana. En ningún momento prestó atención a la presencia de Jade, no por falta de educación, sino porque sabía que ella no se alejaría de él fácilmente salvo que tuviera algo mejor que hacer. No obstante, ¿qué podía ser mejor que esperar a su lado? Las clases seguían suspendidas, como casi todas las actividades, y tal vez eso justificaba que el descontento y aburrimiento del joven americano fuera en aumento.- Bien, necesito que me cuentes algo.- confesó casi en tono suplicante. Admiraba que la chica mantuviera ese excesivo optimismo pese a las adversidades, así que era momento de sacarle provecho.- No sé, un cuento… un chiste...- añadió. Posteriormente extendió el helado hacia la castaña y bebió de su café mientras miraba hacia delante de forma reflexiva.

Publicado por Elliot Rhodes Mar Sep 20, 2016 10:17 pm

—¿Ah, sí?— cuestionó entre sorprendida y divertida.

—Oye, no generalices. Yo nunca hago melodramas— se cruzó de brazos fingiendo haberse ofendido. Por supuesto se puso mucho más feliz cuando el castaño trajo un nuevo pote de helado solo para ella.

—¿Un chiste? No sé...— se llevó el dedo índice a la barbilla. Jade era una persona que no tenía gracia para contar chistes. ¿Por qué? Nunca lo había sabido. —¡Ah, escucha este! Había una vez un pollito dentro de un huevito. Se tiró un pedito y se murió ¡¡JA JA JA JA JA!!— comenzó a descostillarse de risa ella sola, imaginándose al pobre animalito asfixiado por su propio hedor, cubierto de una nube verde. —¿Qué? ¿No es genial?— Cuestionó, pues Elliot no había tenido exactamente la reacción que ella hubiera esperado, ni siquiera después de que ella se hubiera reído sola como una loca.

Se retiraron de la cocina lentamente, tomando Jade del brazo a su amigo y apoyando la cabeza en este.

—Oye, ¿crees que si estuviéramos en una película de terror yo sería la primera en morir? ¿O sería la protagonista? La mayoría de las veces el primer actor, o actriz, es bastante idiota. ¿Me consideras idiota?—preguntó mientras se alejaban por el pasillo.

Publicado por Jade Richteri Lun Oct 03, 2016 2:19 pm

Rodó los ojos y continuó en su mundo durante un instante, esperando anhelante a que Jade cediera a su petición y... ¡vaya que lo hizo! Aunque era absurdo, en verdad que lo era, ¿pero qué más podía esperar de tan peculiar señorita? - No jodas...- negó con la cabeza y sonrió. ¡El chiste era malditamente pésimo! No obstante, dentro de lo que cabe, hubo algo que consiguió hacer reír a Elliot por completo: las carcajadas de su mejor amiga, quien una vez más demostraba cuán demente podía llegar a ser si se lo proponía.- Jade, ¿de dónde sacas tantas estupideces? - no pudo evitar preguntar con sumo interés, manteniendo en su mirada una luz especial que denotaba su gracia ante el suceso: le resultaba maravilloso tener un poco de alegría dentro de aquel infierno.

Minutos más tarde, tras haber devorado sus deliciosos manjares, los americanos decidieron abandonar el comedor para seguir con su conversación en un lugar donde la privacidad e intimidad entre ambos fuera el elemento primordial: la habitación de Rhodes, lugar en el que Richteri dormiría a lo largo de los siguientes días por exigencia del castaño que no pudo evitar sentirse abrumado por las palabras que la joven le dedicara mientras caminaban por el pasillo hacia su destino.- Más bien, te considero demasiado curiosa y por ende distraída, así que… la respuesta es obvia, Jade.- no quiso agregar más, dado que su cerebro encendió de forma automática un foco rojo al respecto. Tendría que vigilar bien a esta tonta si no quería convertirse en uno de los tantos idiotas que perdieron a sus seres queridos durante los últimos meses.

FIN DE ROL CON JADE RICHTERI.

Publicado por Elliot Rhodes Vie Oct 07, 2016 2:18 am

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