Mini Trama ▲ Violet y Donald

Recuerdo del primer mensaje :

Ambientación

Espacio: Habitación de Alfred.
Tiempo: 01 de mayo, Por la mañana.
Clima: Bajas temperaturas, cielo nublado.
Participantes: E. Violet Elliot y Donald F. Wells.

Cuando Alfred vivía su cuarto siempre permanecía cerrado a cal y canto. El director era muy escrupuloso respecto a su privacidad. Ahora que ha muerto se sigue tratando el lugar como si siguiese vivo, cerrando incluso con llave; llave que absolutamente nadie tiene a excepción de las limpiadoras, que son las que pueden entrar a él para seguir acicalándolo como si continuase con vida y pudiera regañarlas por no hacer su trabajo.

Publicado por Víctor E. Hempstead Lun Ago 08, 2016 1:47 pm

Ambientación

Si empujáis el colchón encontraréis una carpeta que Alfred quiso mantener oculta. En ella solo hay dos cosas: una foto a color en la que aparece un bebé rubio de aproximadamente un año y tres papeles. No se pueden leer muy bien porque la mayor parte de los datos han sido borrados con tinta azul, aunque algunas partes sí son legibles. Pertenecen a un trámite de adopción que se realizó en el año 1997. Los nombres de los que adoptaron al bebé están tachados. Tampoco aparece el nombre de los padres biológicos. Solo pone que el niño fue llevado a un orfanato británico al poco de nacer.

Publicado por Víctor E. Hempstead Mar Sep 06, 2016 7:39 pm

Situaciones semejantes a estas, me trasladan a una memoria infantil, ése momento en el que revisas el cuarto de tus padres con el propósito de quitarles algo de dinero y de pronto, te sientes un ladrón profesional por lograr que ni una pieza del lugar, muestre indicios del crimen cometido.
Me enseñé un poco nervioso. Perturbado. El aire de allí, a encierro y madera añeja, me asfixia. Jamás fui un admirador de las antigüedades, me recuerdan que alguien más lo usó y que, su esencia y espíritu, se hallan impregnados en estos. Es como, no sé, usar los calzones de otra persona, ¿sabes?

La respiración se me agita en cuanto tengo la oportunidad de mover el colchón a tu lado, usando la fuerza de los brazos y las piernas, no la de la espalda. Luego no quiero dolores semejantes a las contracciones de un anciano que se queja de que el coxis o la zona lumbar, duelen mucho. Muchísimo. Frotándose a ratos y haciéndose sonar los huesos de la espalda. ¿Tomar el riesgo? No gracias. Y ésa puta colcha pesa dos toneladas.
Malditos sommiers king.
—Al parecer si hay porno escondido —bromeé enérgico. Es la segunda vez que hago el mismo chiste, lo sé. O la tercera. Tomé la carpeta y foto entre manos, y husmeé dubitativo. Te observé de reojo, cómo si buscase respuestas en tus ojos, buceando incluso internamente entre los parámetros de una mente analítica:
—Creo que… —Y digo creo, puedo estar equivocado—: Debe tener algún parentesco o relación con Alfred y todo éste misterio. De lo contrario no lo tendría él, ¿verdad? Porque estamos de acuerdo que él no tiene cara de estar en Servicios Sociales… —intenté leer los papeles—: Ése bebé, hoy debe tener 19 años, supongo. Si mantiene éste expediente escondido, el niño ha vuelto al internado. Sólo que no comprendo la parte de la adopción, ¿por qué darlo?

Publicado por Donald F. Wells Mar Sep 20, 2016 3:55 pm

Me dejé caer en el parqué justo después de mover el colchón, dándome a mí misma unos segundos de merecido descanso. Hasta hacía un mes podía pasar el día entero de aquí para allá, moviendo hasta el mueble más pesado y adoptando poses de otro planeta para poder alcanzar pelusas rebeldes. Pero la falta de sueño y el desgaste psicológico me absorbían las pocas fuerzas que me quedaban. Tan sólo hacía falta verme: la jornada acababa de comenzar y yo ya no podía con mi alma. Lo odiaba. El sentirme así. Si todo se mantenía en la misma línea, la recurrente impotencia terminaría por acabar conmigo tarde o temprano. ¿Qué sería de mí entonces?. ¿Qué sería de la gente que me importa si no pudiera estar ahí para ellos?

Observé a Donald algo abstraída por un instante, antes de centrar mi atención en el hallazgo. Podría estar así durante horas... La sola idea de perderle me aterraba y al mismo tiempo sabía que si sucedía lo contrario, él acabaría completamente devastado. Por eso siempre intentaba mostrarme enérgica y positiva a su lado, aunque por dentro me estuviera quebrando en mil trocitos dispares. Sin embargo, sospechaba que esa técnica no estaba funcionado, que él había encontrado la manera de ver a través de mis paredes. Si de algo estaba segura era que no quería arrastrarlo al pozo de mis inseguridades.

Con cierta flojeza acabé erguiéndome, posando ambos codos en el borde de la cama y comenzando a leer los documentos. Todavía debía asimilar la información, pero ya me sentía mucho más relajada sabiendo que la aventura había servido para algo. Wow. Para el carro. ¿Es cierto lo que mis ojos están leyendo?. -Claro, debe estar relacionado. Además, ¿por qué sino lo escondería?.- Y no, no me imaginaba a Alfred trabajando en los Asuntos Sociales. Aunque, uno nace siendo director, ¿no?. Si nos ponemos a pensar, cabía la posibilidad de que hubiera tenido otros empleos cuando era más joven.

Pero no, no podíamos darlo sentado. Además, después de trabajar un tiempo considerable aquí, una siempre debía inclinarse a lo más extraño. -Sólo que no comprendo la parte de la adopción, ¿por qué darlo?- Eché otro vistazo a uno de los documentos, buscando alguna foto, pero nada de nada. -Mmm quizás es que era un hijo no deseado... Pero entonces, ¿el hijo de Alfred es un estudiante de Dunkeheit?. Si es así, quizás deberíamos empezar a buscar en las fichas de los estudiantes. Ya sabemos que es varón y que tiene 19 años. Algo es algo- Seguía contemplando los informes, pero lo demás estaba tachado.

Publicado por E. Violet Elliot Miér Oct 05, 2016 8:14 pm

Minitrama finalizada.

Publicado por M. Yvette Gunnhild Miér Oct 12, 2016 6:00 pm

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