Mini Trama ▲ Mark P. y Olenna

Ambientación

Espacio: Capilla del Cementerio.
Tiempo: 15 de marzo, Por la mañana.
Clima: Vientos fuertes después de una tormenta.
Participante: Mark Pratchett y Olenna Vorobiova

Publicado por Whispers Dom Mayo 01, 2016 1:16 pm

Esa noche había estado lloviendo y tronando como si el cielo se fuese a caer sobre ellos pero ya por la mañana, había una agradable y húmeda calma en el ambiente. Era fin de semana así que aprovecharía la mañana para inspeccionar los alrededores, algo que tenía ganas de hacer desde que Ophy le había advertido de las desapariciones. Vestido con ropa parecida a la que usaría para una excursión por el monte, deambuló por allí, dejando que el agradable olor a tierra mojada le inundara.

Le gustaba andar al aire libre y aunque no le hubiese gustado, con su trabajo anterior era algo que se le daba bien. O sea, estamos hablando de que para que te seleccionaran te hacían cosas como soltarte en mitad de la selva o subir montañas contrarreloj. Al fin y al cabo, como siempre decía desde su ignorancia inglesa, Gales y Escocia eran casi lo mismo ¿No? Cuando llegó a uno de los extremos del recinto y vio la valla, decidió tirar por otro lado. De todas formas, no parecía ni excesivamente alta ni segura, nada que con una escalera o algo así no pudieses saltar. De todas formas, tampoco se acercó mucho para comprobarlo.

Y así llegó al cementerio. Era probable que le hubiesen mencionado su existencia antes pero para él fue casi como una sorpresa. ¿Qué diablos hacía un cementerio en un sitio así? No había un pueblo en los alrededores ni nada así, solo estaría enterrada gente del Internado ¿No? ¿Tanta gente se moría en ese sitio que necesitaban un cementerio solo para ellos? No parecía muy lógico. Tras aburrirse de inspeccionar los nombres de la lápidas (Como si eso le fuese a servir de algo) entró en la capilla tras empujar la puerta. Estaba vacía y era algo siniestra con el viento silbando fuera, pero era mejor que estar a la interperie.

Tras rascarse la cabeza unos instantes, se puso a buscar algún tipo de palanca o algo así. Si él estuviese secuestrando gente de un internado SIN NINGUNA DUDA utilizaría la capilla del cementerio como guarida. Era algo morbosamente cliché.

Publicado por Mark Pratchett Dom Mayo 01, 2016 3:47 pm

Corría sin mirar atrás, descalza y exhausta tras el cautiverio. Corría como si no hubiese un mañana, pues probablemente no lo hubiese...

Olenna sorteó aquellos pasillos repletos de celdas en una especie de trance. La realidad se tornaba difusa, ¿era real aquello? Había soñado tantas veces con escapar que, en el fondo, esperaba despertar en cualquier momento.

No estaba asustada, estaba aterrorizada. ¡Había sido secuestrada! ¡¿Cómo era posible?! Sin duda, la intención de sus captores había sido enriquecerse a costa de la fortuna de su familia. Pero, ¿por qué no la habían liberado ya? No imaginaba a su madre racaneando unos cuantos millones si de ello dependía su seguridad. ¡Habráse visto! De cualquier forma, Olenna no pensaba quedarse para verificar su hipótesis.

El leve chirrido de una puerta y un resquicio de luz a la lejanía llamaron su atención. Sus maltrechos piececitos se dirigieron tambaleantes hacia allí, desorientada y sedienta. Tenía miedo de encontrarse con uno de sus secuestradores, pero no tenía sentido seguir deambulando por aquellas... catacumbas.

Y, en efecto, allí estaba aquel ser ruin y despreciable. Esperándola con la malicia brillando en la mirada, presto para abalanzarse sobre ella aprovechando su pésima forma física y devolverla así a su oscura celda. - ¡ATRÁS! - bramó la rusa, encolerizada a pesar de su agotamiento. Nunca se había peleado, pero en aquel momento estaba dispuesta a hacerlo. ¡Su vida dependía de ello! Olenna miró a su alrededor en busca de algún arma mortífera de la cual valerse y... ¡BINGO!

Un palo de fregona que debía de llevar décadas allí, oxidado y mugriento, parecía esperarla junto a la puerta. Olenna lo alcanzó y lo blandió cual espada samurái. - ¡Aléjate de la puerta y déjame pasar! ¡No respondo de mí! ¡¡QUE ESTOY MUY LOCA, EEH, MUY LOCA!! - Gritaba histéricamente, intentando a todas luces intimidar al hombre.

Publicado por Invitado Jue Mayo 05, 2016 10:26 pm

Publicado por Whispers Vie Mayo 06, 2016 1:41 pm

Publicado por Mark Pratchett Vie Mayo 06, 2016 2:20 pm

Publicado por Whispers Sáb Mayo 28, 2016 12:51 pm

Publicado por Mark Pratchett Sáb Mayo 28, 2016 1:50 pm

Publicado por Whispers Sáb Mayo 28, 2016 2:59 pm

Antes de abandonar las (Mark había decidido llamarlas así) catacumbas, Mark recogió lo que se había caído en el suelo, lo inspeccionaría una vez estuviera ya la chica a buen recaudo. La llevó todo el camino a cuestas hasta la enfermería, dando una explicación vaga de que se la había encontrado en el cementerio. No le apetecía que nadie se pusiese a explorar eso, era demasiado peligroso. Es más, antes de abandonar la capilla, había dejado la estatua tal y como la había encontrado. Cuando reuniera un par de cosas necesarias y a alguien de confianza, volvería para ver qué había ahí.

Una vez salió de la enfermería cuando ya no había mucho más que pudiese hacer, se quedó sentado en un banco del pasillo, estirando los hombros y la espalda, algo cansado. Había sido un camino largo y aunque estaba acostumbrado a hacer marchas así, cansar siempre cansan. Otra cosa es tu tolerancia al mismo y al dolor. Sacó de su bolsillo lo que se había encontrado en el suelo y lo inspeccionó. Era, ehm... ¿Plata, oro blanco, platino? Nunca había tenido la menor idea sobre esas cosas pero pesar pesaba. Lo abrió y leyó el papelito que contenía. Parecía algo que escribiría el protagonista de una novela de Lovecraft. O...

Había una norma del internado sospechosamente específica sobre el acceso al lago. ¿Y si esas cavernas o lo que fuesen bajo el cementerio conectaran con el mismo? Alguna gruta subterránea inundada o algo así. Sería interesante de investigar pero en pleno marzo y sin equipo de neopreno era llamar a la hipotermia profunda. Se guardó el papelito en un bolsillo para luego inspeccionar las fotos. Una tenía a dos perfectos desconocidos y la otra era... una alumna. Sí, esa del equipo... ese de deporte.

Bueno, ya cuando le diera clase se acordaría de su nombre. Tenía que hablar un par de cosas con ella.

Publicado por Mark Pratchett Sáb Mayo 28, 2016 5:29 pm

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