▲ ¿Le tienes miedo a la oscuridad? (Mini-trama)

Recuerdo del primer mensaje :

La noche de las trastadas, pensó en silencio aquella directora mientras observaba por el ventanal de su despacho. El traje negro se ajustaba a su cuerpo y un peinado recogía todo su cabello de manera tal que no pasara su nuca. Se acomodo el saco antes de ir por su usual mochila. Era tradición, una ocurrencia para mantener la bromas al margen, una tradición que consistía en que, por una noche, las puertas del internado estarían cerradas, y todos los estudiantes, docentes, trabajadores dormirían en el bosque, en una acampada. El frío no era problema. Los colchones inflables que se daban a cada estudiante tenían un sistema para que se mantuvieran calientes. Yvette compraba dormir ahí dentro, con dormir dentro de un malvavisco gigante, pero era necesario. Ya varias bromas se habían presentado y no quería que se repitieran.

Ni las campanadas anunciaron las cinco de la tarde, todos se reunieron en el Hall de entrada. La directora se aclaro la garganta para llamar la atención. --Quienes pasan por primera vez noche de halloween en Dunkelheit, no tengan miedo, no hemos tenido incidentes desde hace un par de años, y esperamos que se mantenga de esa forma. Ahora, pueden seguirme al claro donde estableceremos el campamento y pasaremos la noche-- Todos los profesores estaban al tanto. Se armaron las carpas antes de que caiga el sol, y Alfred se encargo de encender la fogata que intentaba quedar en el medio de todas las carpas. Medianoche llegó, y antes de declarar que todos fueran a dormir, Yvette aclaro su garganta nuevamente.

--Hay quienes ya saben el final de esta historia, para quienes no, esta noche podrán deducir por ustedes mismos si es cierto aquel rumor sobre que soy muy buena contando historias de terror.-- Comienza a decir, con su rostro iluminado solamente por el fuego. La mayoría se encontraba rodeando la fogata, tras comer el guiso que habían preparado los de cocina. --Su nombre era Halsey. Fue una estudiante aquí en este mismo internado. Tenía quince años cuando fue descubierta en el bosque asesinando un pobre conejo, la delataron, en esa época, el internado tenía problemas con las comidas, dudaban que fueran capaces de sobrevivir todo el invierno, y los conejos no solo aparecían muertos, aparecían desmembrados, imposible sacar comida de ellos. Al encontrar a la joven culpable, la encerraron en su dormitorio como castigo, los castigos no solían durar mas de dos días, y aún así, era completamente demente, encerrar a una persona dos días, dos días sin comida, dos días sin hablar con nadie, dos días sobreviviendo a líquido. A Halsey le dieron tres, esperando así que aprendiera su lección, por su culpa casi se quedan si comida, ella debía saber que era eso, para poder tener mas cuidado la próxima vez. La sorpresa no fue que al primer día, mas conejos muertos aparecieron en el jardín, ni que al segundo algunos estudiantes confesaran haber visto a la joven. La sorpresa estuvo en que al tercer día, cuando abrieron la puerta, la joven no estaba.

Alarmados, los directivos llamaron a los padres de la joven para que se hicieran cargo de ella, mientras ellos buscaban por los terrenos a aquella rubia de intensos ojos celestes. Los padres llegaron al internado tres días después, y aún para esos días, no habían encontrado a la joven, pero ese día, apareció una muchacha, asustada era poco, estaba aterrada, decía haber encontrado a Halsey, cubierta de tierra y barro, con una expresión en su cara que solo significaba demencia. Ingrid, aquella joven que la había visto, de intensos cabellos rojos y mirada verde, relató cada detalle que había visto, el cuchillo en la mano de la rubia, la mirada de asesina, sus ropas desgarradas, el lugar donde todo había pasado, pero oculto algo, un secreto. Halsey le había hablado y ella había escuchado, solo que no creyó. Mas tarde las personas supieron lo que le había dicho, pero ya era tarde, porque Halsey le había dicho que si decía algo sobre ella, iba a morir, e Ingrid fue encontrada a mitad del bosque, con una soga amarrada al cuello, colgando de la rama de un árbol.

Muchos pensaron que se trataba de un suicidio, que no había sabido que hacer, y la culpa había hecho lo suyo. Pero días mas tarde, un joven desapareció y fue encontrado en el bosque, en las mismas condiciones que Ingrid. Los estudiantes empezaron a caer, uno por uno, hasta que la madre de Halsey se paro en medio del bosque, preguntando desesperada que era lo que quería, que ella quería ayudar. Nadie creyó que alguien fuera a aparecer, pero la joven que llevaba perdida mas de un mes en esos bosques lo hizo, con sus manos, boca y prendas manchadas de sangre. Se acerco a su madre que la abrazo contenta de verla de nuevo. Halsey le devolvió el abrazo antes de clavar el cuchillo en su estomago, y mientras su madre caía, desangrándose, muriendo de una forma tortuosa la rubia pidió no ser buscada nunca mas. Y así se hizo, nadie mas la volvió a buscar, incluso hay quienes dicen verla aún en los bosques, pero también hay un mito, dicen que quien la encuentra muere. Buscarla es como tener una soga en el cuello, solo que están parados sobre un banco y no quita la respiración, pero, si decides saltar, atente a las consecuencias-- Paso una mano por su cuello, dando a entender a los estudiantes que pasaba cuando la encontraban. Su placer era contar historias de terror. Al finalizar. Pestañeo un par de veces, mostrando una sonrisa. --La noche es larga, mejor es ir a dormir--

Publicado por M. Yvette Gunnhild Mar Oct 27, 2015 12:47 am

No se sorprende al escuchar la reacción de Callie, solo le molesta que esta no responda a su pregunta, aunque lo mas probable es que la haya pasado como siempre, y si algo malo paso, la castaña no era muy propensa a contarlo. Lo que si le extraña es aquel grito. Rose y Callie se ponen en guardia de inmediato, y el menor ignora la mirada que su hermana le manda y sigue a la otra joven, con una mirada temerosa en sus ojos. Caminaban rápido, aún así, Wes sentía que no era suficiente, y aquellos gritos que continuaron no hicieron mas que confirmar su reacción.

Se detiene un segundo en su lugar, clavando sus pies en la tierra, su boca se entreabre cuando el último grito de socorro queda en la mitad. Algo estaba pasando, algo malo, y ni tenían tiempo para pensar si era una broma, si alguien estaba en apuro necesitaban moverse mas rápido. —¡Vamos! Hay que ir a ayudar— Les dice a las otras dos y echa a correr en dirección de los gritos. Tenían que alcanzarlas, el bosque podía tener animales peligrosos, alguien se podría haber lastimado en una excursión, no podían pasar eso por alto.

Publicado por Invitado Mar Nov 03, 2015 1:28 am

—Tu siempre eres el dormilón— Le dice con voz ronca a Isak, aún sin terminar de despertarse, le hubiera gustado quedarse así, pero el grito basto para que Cassie se levantara y los sentidos del joven se abrieran mas rápidos que sus ojos. También se pone de pie, y aprovecha que los dos chicos salen de la carpa para vestirse rápido, sale de la carpa poniendose la última zapatilla a los saltos.

Asiente en silencio a las palabras dichas, había que ir. Miro a los presentes, reconociendo a Rose y a Callie. Levanto el brazo para hacerles señas, pero entonces los gritos comenzaron a pedir ayuda, y un jovencito que estaba con las dos jóvenes echo a correr en dirección de los mismos. Supuso que estaba pasando por la mente de los otros cuatro, de Isak, de Cass, Callie y Rose, si todo lo que habían visto tendrían algo que ver con eso. ¿La historia de la Directora sería una advertencia o una amenaza? Cualquiera sea el motivo, no tenían tiempo que perder. —Tenemos que apurarnos— Comenta, comenzando a correr hacia los gritos que ya no se escuchaban. ¿Qué estaba pasando en ese lugar?

Publicado por Brennan F. Grunwald Mar Nov 03, 2015 3:43 pm

Había caído rendido de inmediato al recostarse en la carpa donde había ido a parar, no solía gustarle demasiado como pasaban el día de Halloween en el internado, antes en su casa siempre lograba ser convencido por sus hermanas para disfrazarse, aunque fuera para bromear entre ellos en casa, dar una vuelta por la ciudad y luego volver para comer dulces hechos por su madre. Pero no, en el internado su idea de diversión era mandarlos a congelarse en el tenebroso bosque cercano al lugar, por lo menos agradecía que no les diera por hacerlos acampar frente al lago.

A la mañana siguiente un espantoso grito lo saco de su sueño, se sentó alarmado y salió de la carpa preguntándose si eran los demás chicos jugando, cosa que lo irritaría bastante porque no había sido nada divertido despertarse así, agradece tener los zapatos puestos, ya que ve a todos alarmados y escucha enseguida gritos de ayuda. No lo piensa demasiado y sigue a los que comienzan a correr hacia el sonido.

Publicado por Invitado Mar Nov 03, 2015 5:15 pm

Sale de la carpa tras Isak para dirigirse donde está su hermana junto a Rose y otro chico más joven, va a preguntarles si saben algo cuando los gritos de ayuda comienzan a expandirse por el bosque, una pequeña parte de su mente piensa distraída que agradece no ser la única que escucho dichos gritos, así descartaba que todo el estrés del asunto la estaban volviendo loca. Si no supiera que la directora carece de sentido del humor pensaría de buena gana que es alguna especie de broma de Halloween, referente a la historia contada la noche anterior en la fogata, pero como no es el caso, puede preocuparse con bastantes razones.

El pequeño comienza a correr tras los gritos y de inmediato Gru les hace seña al resto para que vayan todos, cosa que, comienzan a imitar, la morena mira a su melliza de reojo y comienza a correr tras el castaño. En esos momentos no le parecía muy buena idea meterse en el bosque donde habían visto un cadáver, menos tras gritos de ayuda, pero no dejaría que Gru fuera al lugar por su cuenta.

Publicado por Invitado Mar Nov 03, 2015 5:24 pm

Publicado por M. Rose Wood Mar Nov 03, 2015 7:34 pm

Sus pasos no eran apresurados, pues solo fue un grito. Estaba esperando a Brennan cuando escuchó los gritos de ayuda, llamando al chico para que salga ya de la carpa. Un chico pecoso, probablemente de primero o segundo, fue el primero en salir corriendo. Tan joven y tan curioso. Mira, se parece un poco a mi. Sus pasos se apresuraron cuando vio a Gru salir poniéndose la última zapatilla, esperando que no se caiga por bobo, ya que Isak se moriría de la risa. El cese de los pedidos de ayuda hace que Isak se detenga por un segundo junto a su corazón. ¿Podría ser que...? Esperemos que no.

Isak sale corriendo tras sus compañeros de nuevo. En su mente empiezan a volver los pensamientos sobre el otro día en la cabaña. ¿Y si se topaban con esta de nuevo? ¿Habría otro cuerpo más adentro? ¿Otro número, o móvil? Tantas dudas imposibles de contestar, ocultas bajo el manto del misterio. Dijeron que la curiosidad mató al gato. ¿Mataría esta curiosidad a Isak?

Publicado por Isak T. Bruhn Mar Nov 03, 2015 11:05 pm

No fue la única al detenerse al escuchar los ruidos, pero se sorprendió al observar la reacción de Wes. Todo ocurre rápido, Rose lo sigue, a lo lejos, Gru, Cass e Isak también. Deja una marca en el piso cuando se inclina para tomar carrera a la mayor velocidad posible para poder alcanzarlos. Lo logra rápido, estaba acostumbrada a eso, en especial en carreras cortas. Mientras dejaba sus huellas en la tierra no podía hacer otra cosa mas que pensar. ¿Qué significaba todo eso? Habrían. Tiene que tomar aire antes de pensar lo que estaba a punto de pensar. Habrían matado a la persona que estaba gritando. Sus pensamientos no hicieron mas que acelerar intentando llegar a Wes para detenerlo. En el bosque aún había niebla, era una estupidez adentrarse así, a las corridas, se podrían perder.

—¡Esperen!— Grita con el volumen mas prudente para intentar no llamar la atención a cualquier cosa que hubiera entre los árboles. —¡Deténganse!— Y sus palabras no eran una sugerencia, era una orden. —Entremos todos juntos, pero con cuidado, no se ve mucho con la niebla y el peor error que podemos cometer es perder a alguien. Nos mantenemos juntos, ¿Vale?— Nos mantenemos juntos, repitió para sus adentros. Ya en mas calma, el bosque tomaba ligeramente un poco mas de nitidez, aunque creía que faltaban unas horas antes de que la claridad sea absoluta.

Publicado por Calliope C. Rohmer Miér Nov 04, 2015 12:11 am

Nunca había entendido como era el trabajo de intimidación de Grace sobre el resto de las personas, pero no era algo que Cole se comiera. Desde el momento en que la había visto, había observado a una niña que se creía demasiado grande, y cada cosa que decía no hacía mas que confirmarlo. Ignoro la amenaza de forma olímpica, y luego río al escuchar como se presentaba ante Benjamín. —No te preocupes, nunca hace nada de lo que dice que va a hacer, ¿Verdad, Campanita?— Bromea con ella, sabiendo que algún día la terminaría de sacar de sus casillas y tendría que lidiar con la verdadera Grace enojada, pero seguía sin tenerle miedo.

Su mirada estaba en el grupo de tres personas donde Rose estaba dentro, esas personas llevaban mas en el internado, sabrían que hacer, solo había que esperar a que reaccionaran, y lo hacen. Cuando nuevos gritos comienzan a escucharse, el mas niño de todos sale corriendo, mas personas también parecen salir de la nada para adelantarse, Rose y la otra chica apresuran el paso entrando en la carrera. Y eso podía ser todo, podía quedarse tranquilo de que esas personas lo solucionarían. Sin embargo, levanta la mano indicando a los otros dos que paren de hablar. —Creo que si nos vamos a acercar será mejor que nos apuremos antes de perder al grupo— Comenta, y se adentra también en la carrera hasta alcanzarlos. Solo llega a escuchar el final de lo que dice la morocha. —¿Me perdí el discurso?—

Publicado por J. Cole Green Miér Nov 04, 2015 9:43 am

Publicado por M. Rose Wood Miér Nov 04, 2015 10:08 am

La situación daba un poco de miedo, pero tenían que ayudar a la persona que estaba gritando, no la podían dejar sola, mas si necesitaba ayuda. No se detiene cuando su hermana le pide que pare, pero si lo hace cuando le toma la muñeca. Busca sus ojos tras evitar caer de fauces al piso, Rose no solía tomar a las personas, mas solo lo abrazaba pocas veces y eso generaba un gran esfuerzo. La observa curioso de la fuerza que lo tomaba, y del miedo que se presentaba ante sus ojos. Se queda mudo y luego la castaña lo suelta. Se juntan con otro grupo de personas que también habían acudido en la ayuda de esta persona desconocida. Callie es la encargada de hablar, de organizar mas que nada, sus palabras calman al pequeño que asiente acordando que es mejor ir todos juntos, mas cuando la niebla no menguaba.

—¿Por dónde deberíamos empezar a buscar?— Pregunta a los mayores esperando que tengan una respuesta, aunque por sus caras, sabían tanto como él.

Publicado por Invitado Miér Nov 04, 2015 2:47 pm

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